21/09/2016
Hoy
no subiré hasta las estrellas porque ellas bajarán hasta mi. Han visto mi dolor
y han sentido compasión, me han murmurado y me han prometido de la mano no
soltarme. Una que brillaba mas que ninguna me ha dicho que en ella están mis
seres mas queridos que partieron de esta tierra. No he dudado de su voz y con
gratitud he abierto mis sentidos para gozarlos en otras dimensiones. He
llorado, no se si de gozo o tristeza, pero he limpiado y he agradecido todo
momento vivido. No sufras, me han dicho, eres una luz y con ella te has de
alumbrar, caminas en recto pero en momentos verás tu camino torcido, duro,
pedregoso y hasta peligroso, pero no te has de sentir invadida solo por esa
tosquedad y desesperanza. Al final del camino hay una luz y por ella te verás
protegida si eres capaz de sentirla. El hombre nunca está solo, nunca muere,
nunca deja de ser una luz, solamente al hundirse en la tristeza se oculta como
un caracol en su casa. Despierta y siente.
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