domingo, 18 de octubre de 2015

Omaras 025_18/10/2015

18/10/2015

Cuando tus ojos cansados se cierren, abrirás la puerta para entrar y descansar, cuando tu vida llegue a mi casa yo te recibiré y te estrecharé entre mis brazos. Mis abrazos ahora recibes pero tal vez aún no los sientas porque no has cerrado los ojos para sentirme. Cuando tus pies cansados por el camino sangren por las heridas y seas consciente de ello, verás con los ojos cerrados que tal vez no has protegido con buen calzado los pies que te guiaban por el camino, si eres capaz de ver que no te has de guiar por los pies si no están bien protegidos, te produces llagas, mas al ver tus llagas pondrás remedio para curarlas y hay de aquel que siendo consciente de su dolor no remedia su mal y sigue castigando su cuerpo a pesar de verlo sangrar.
Saliste de una prisión y vas un poco perdido, la costumbre hizo huella en ti y la libertad ahora te abruma. Mas cierra ahora tus ojos y no los emplees para ver lo que no es visible, solo los ojos abiertos en tu corazón te han de mostrar tu camino. la respuesta y los mensajes te llegan por el camino, en las cuestas te quejas, en las bajadas te embalas, mantente uniforme en el camino, en el andar reflejas tu intención y esta es tu voz interior. Tu voz es clara, limpia, voz que abriga tu corazón y calienta tu cuerpo, cuida tus pasos y es fiel amigo. Al entrar por la puerta que yo te abro verás la claridad inmensa, así como el poder que te da el haber entrado en mi morada. Mi morada ahora es tuya, tu has elegido este momento para entrar, ahora no eres el invitado, ni el huésped, ahora es tu casa, porque tu lo has elegido. No mas engaños, no mas dudas ni trampa, no mas intrusos en el camino. tu has elegido un camino limpio, una voz que te hable, un calzado que no lastimen, un corazón limpio, unos ojos cerrados, una mano que te ayude y un destino de luz. Únete, fúndete con esa mano y anda erguido y sin cansancio, los pesares ya marchitos han quedado muy atrás, en adelante la luz, la paz, la bienaventuranza dispuesta para ti espera, abrir puerta porque ya estás, has llamado y se te ha abierto. Adelante, eres bienvenido amado y respetado. Se te ha reconocido ya estás en esta luz que has buscado.