21/02/08
Objetivos que perseguís que no se encuentran en armonía con vosotros desecharlos y hacer caso omiso de ellos.
Encontrar en vosotros mismos la necesidad de pertenecer a la universalidad de todo. Crecer en expansión con la naturaleza de todo.
Caminad erguidos, seguros y con la firmeza del convencimiento que os trasmite vuestro yo superior, porque sintiendo y caminando se está creciendo.
Los efectos especiales anularlos, solamente ir acompañados por vuestro sentimiento de unidad con la presencia.
La vanidad ya no os pertenece, habéis entrado en otro sistema que os eleva por encima de estos planos. Continuar investigando y siguiendo los pasos del Maestro que os habla. Escucharlo, no tapéis vuestros oídos y cerréis el corazón. El Maestro está presente siempre en vosotros. Pertenece a otro plano de conciencia, y vosotros humanos que perseguís este acercamiento, debéis sentirlo y escucharlo para seguir sus pasos. El camino se hace dulce si al Maestro os arrimáis y sabéis encontrar en él, el calor que os armoniza.
Solamente las resistencias humanas son capaces de aislaros de éste hecho.
Romper barreras y sintonizaros con la verdadera esencia de la vida, que es la vida. Saborear las exquisiteces que se os presentan y acudir cada día a la llamada de vuestra voz interna. Nada se os cerrará porque todo os pertenece. Tomarlo.
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