19/01/2012
Las orquestas suenan pero pocos las escuchan, la peligrosidad de estos desencuentros provocan en los humanos signos de fatiga, cansancio y desazón, porque todo humano ha de permanecer atento y ser fiel en su escucha y en su camino, seguir la orquesta que le marca su rumbo, pocos son capaces de permanecer en la atención total para captar esas notas que le armonizan, por eso ahora os indicamos que el camino a seguir es de atención constante a esa armonía que os suena porque si así atentos la seguís veréis como todo os parece mas claro y accesible problemas que ahora os ahogan serán tablas de salvación en el futuro de la luz. Amados, prestar los oídos a la sintonía mas clara que os llega y sin tensión ni provocación hacer llegar hasta vuestro interior esa melodía que os ciega otros caminos. Distinguiros por esa actitud que os lleva a ser practicantes verdaderos de una esencia limpia que os empuja en el camino.
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