23/09/11
Benditos seáis hijos de la vida, porque pudiendo elegir elegisteis el servicio.
Vuestro plano está rodeado de una vibración inadecuada que poco a poco se va transformando y llenando todos los espacios con una luz de vibración adecuada. Esta vibración va unida y uniendo, unificando lo que ya no puede permanecer separado porque ya no existe tal separación. A lo largo de vuestra historia, vuestro proceso, muchos humanos hijos de la vida, conscientes de su trabajo, su labor, sin distinción de raza o clase han ido trabajando por esta unión. Nada debe permanecer separado, todo ha de formar una unidad firme y fuerte para avanzar en bloque, los seres que se desprendan de esta unión no podrán pasar a la siguiente nota. La comunidad os abraza y os hace ver que el punto de partida es la fuerza de la unión, una unión que se ha de manifestar en cada situación y cada uno de vosotros. Unión es amor. Amar es la palabra que os ha de guiar para armonizaros y seguir fieles el dictado de vuestro ser, porque vuestro ser es solo amor y como tal se ha de manifestar. Descubriros corazones, sentiros así formar parte de esta comunidad que os abraza, os ama y os fortalece en la fe y la esperanza de un mundo armónico. Todo se va a desarrollar si una suficiente cantidad de hijos dan respuesta a esa llamada afirmativamente. Las notas nos llegan a nuestra esfera y con nuestra energía vamos formando una adecuada para devolvérosla aumentada, es un proceso de intercambio que no conviene romper o interrumpir. Grandes oleadas de energía quieren atrapar a esta luz, que irrumpe por todos los lados haciendo que el proceso se interrumpa, pero amados, es de especial importancia que cada uno de vosotros fije su atención a su estado y permanezca fielmente unido y conectado a su NATURALEZA, única reconocida en las altas esferas. Ser constantes y fieles a vuestro interior, conectados y seguir andando con la seguridad de un mañana seguro de luz y amor.